Cuando hablamos de una empresa que a través de su comunicación, de sus piezas de…

Criterios Sostenibles – Aplicación a nivel local
De cara al lanzamiento de nuestro blog, nos parece oportuno comenzar tratando conceptos como: la sostenibilidad, el medio ambiente o la responsabilidad social empresarial que forman parte de nuestro “leitmotiv” institucional. Si bien estos temas no están en el centro de la agenda mediática de nuestro país, resulta imperativo continuar reflexionando en torno a ellos, aprendiendo, incorporando discusiones, y lo más importante tomando acción desde el lugar que corresponda, a nivel personal o profesional para despertar consciencia y amplificar el mensaje en nuestro entorno.
Los beneficios de “ser sostenibles” los percibimos continuamente en nuestra forma de vida, las acciones rutinarias y los efectos que las mismas causan sobre el medio ambiente. Preguntándonos por ejemplo: ¿Cómo me desplazo?, ¿qué como?, ¿qué me compro?, ¿dónde lo compro?, ¿lo tiro?, ¿dónde lo tiro?, ¿de dónde viene lo que compro? Es la forma que vamos tomando consciencia de nuestras acciones. Del mismo modo sucede a nivel profesional donde tomamos decisiones que generan efectos económicos, funcionales, de rentabilidad, de visibilidad o sostenibles.
El criterio de sostenibilidad debería ser incorporado a cualquier nivel y en todos los ámbitos de nuestra vida. Abarcando todas las etapas dentro de una organización, desde la fase de planificación estratégica, la fase de redacción del proyecto, la fase de construcción hasta la fase de desarrollo o distribución. En el Congreso Nacional de Medio Ambiente (CONAMA) de 2016, se destacó la importancia de “ambientalizar” el propio acto profesional.
Cuando hablamos de criterios de sostenibilidad nos referimos a aquellas pautas que evitan o minimizan el impacto ambiental, económico y social (el triple impacto), producido por la acción desarrollada. Las buenas prácticas de una compañía, que sostiene tener Responsabilidad Social Empresarial, RSE, debe ser coherente en su modus operandi y estar alineada en su proceso con la sostenibilidad, actuando en consecuencia e incorporando estos criterios en la toma de decisiones.
En los emprendimientos o negocios sostenibles los beneficios se ven reflejados en nuevas alternativas de innovación, acompañamiento de políticas públicas, en el apoyo financiero enfocado al sector (las llamadas inversiones de impacto), en la sostenibilidad a largo plazo o en la mitigación de los efectos de gases de efecto invernadero. También son de enorme relevancia los impactos positivos sobre la salud, la calidad de vida, el bienestar y un mejor ambiente laboral.
Los criterios de impacto social los podemos resumir en el cuidado y buen trato hacia los empleados, la cadena de valor y el RSE hacia el interior y exterior de la empresa. Hay puntos fundamentales a considerar al generar este impacto como: la implementación de prácticas y políticas inclusivas, el respeto hacia los Derechos Humanos, las condiciones sociales, las condiciones de trabajo y la salud ocupacional.
Las pautas integradas desde la acción, ayudan a frenar el proceso de cambio climático en el que estamos inmersos. Es crucial identificar los efectos de las acciones y evaluar la magnitud del impacto, cuantificando los efectos y realizando un diagnóstico de las consecuencias positivas y negativas que genera cada acción. El impacto ambiental se mide mediante, la Huella de Carbono de un producto o una organización, Análisis del ciclo de Vida (ACV), o mediante la Huella ecológica.
En base a estos resultados se aplican las medidas preventivas o correctoras necesarias, agrupadas según los elementos que se actúa, por ejemplo: eficiencia energética, gestión de residuos, consumo responsable, movilidad sostenible, difusión o sensibilización. Algunas de estas medidas son: las Certificaciones en las organizaciones: Implantación de Sistemas de Gestión, Normas ISO, Responsabilidad Social Corporativa o la Economía Circular; que nos permitirían detectar los puntos débiles de nuestros sistemas o procesos y corregirlos.
Por otra parte a nivel local se han ido generado y consolidando proyectos y organizaciones sostenibles dentro del marco de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible, (ODS) que son los grandes desafíos que hoy enfrenta la humanidad, hacia el logro de una mejor calidad de vida, del desarrollo económico, la protección del medio ambiente y la justicia social.
Para enumerar algunos de los más relevantes:
*Desde el año 2007 se han ido realizando cambios significativos en la matriz energética de nuestro país, donde el 98 % de la misma se produce con fuentes renovables, el otro 2 % corresponde a la generación con combustibles fósiles, cifra mucho menor en comparación con otros países.
*Del mismo modo a partir del 2015 vemos un creciente incremento de la inversión pública y privada en el desarrollo del ecosistema emprendedor, dándose las condiciones propicias para fomentar y apoyar las inversiones de impacto.
*El organismo regulador y responsable de las compras públicas y la contratación (ARCE), presentó un proyecto que pretende incorporar criterios diferenciales en las compras para las empresas que puedan demostrar prácticas sostenibles. La política de Compras Públicas Sostenibles busca que la gestión de las compras incorpore la obtención del mayor valor considerando el impacto económico, ambiental y social de los bienes, servicios y obras a lo largo del ciclo de vida de los productos.
*Por último desde el ámbito jurídico se dio un gran paso con la aprobación de la ley B.I.C. (regulación de las Empresas de Beneficio e Interés Colectivo) en Diputados, la cual tiene como objetivo primordial establecer las condiciones para que las empresas incorporen en sus estatutos el compromiso de crear valor económico a largo plazo, generando impacto positivo en la sociedad y el medio ambiente. Este proyecto se enmarca dentro de las acciones tendientes a la solución de problemas de sustentabilidad, creación de empleo y crecimiento económico, dando mayores posibilidades a la iniciativa privada y reconociendo el enorme potencial de los emprendedores en el cumplimiento de estos objetivos de interés público.
De a poco y con el esfuerzo de todos los sectores de la sociedad, tanto en políticas públicas como en iniciativas privadas, se está transitando el mejor camino hacia una sociedad más sostenible, resiliente, inclusiva, en definitiva una sociedad más justa.
Fuente: Inversión de impacto en Uruguay PNUD Urjconline.atavist.com
Nota: Natalia Guerra
Fotografía: Gonzalo Reggio
Diseño Gráfico: Sylvie Vernazza & Carolina Mascheroni